El 27 de mayo de 2022 tuvimos el privilegio de visitar el Palacio del Marqués de Rafal en Orihuela con algunos miembros del Consistorio, el Alcalde, Manuel Pineda y esposa, las concejalas Laura Velasco y Noemí Cutillas con sus mellizos, que con sus innumerables preguntas hicieron una delicia del recorrido. Era una visita muy deseada que podría ser la última después de la compra del Palacio por la Generalitat Valenciana. Fue una tarde de emociones, ya que, en mi caso, era la primera vez que iba a visitar el recinto donde comenzó todo lo concerniente al origen de nuestro Marquesado, allá por el año 1636.

El primer Marqués de Rafal, D. Jerónimo de Rocamora y Thomás fue la principal familia nobiliaria de Orihuela y al mismo tiempo el poseedor de gran parte de la Vega Baja. El marquesado se remonta al siglo XVII, pero el origen es de la familia Rocamora que se remonta a la época de Jaime I, en el siglo XIII.

La memoria colectiva de un pueblo se construye con el lenguaje, con una narración que aporte significado y comprensión, por lo tanto, el tiempo se hace humano en la narración. La memoria indisolublemente ligada a los espacios en los que acontecieron los hechos que narran, dejan de ser espacios neutros y vacíos para ser lugares de memoria. Por eso, para que nos quede, al menos, el recuerdo tanto del espacio como de algunos de los objetos, desde el Consistorio de Rafal nos hemos propuesto recuperar parte del patrimonio para que quede constancia de nuestro Marquesado en nuestro pueblo ya que, por desgracia, ha desaparecido una gran parte física de él.

Los enseres que hemos adquirido, tal como consta en la factura de compraventa, son retazos de nuestra historia que nos puedan servir como detonante y nos abran las ganas de dejarnos llevar por esos ritmos y significados ancestrales que contienen la búsqueda del sentido de la historia y la vida de nuestro pueblo, Rafal. Además de los enseres adquiridos, el Marqués de Valdesevilla, D. Iván Pardo- Manuel de Villena y de L’Epine y su esposa, Dª. Lucrecia, nos donaron una mesita, una silla más de las adquiridas, el escudo del marquesado en papel y el mapa que marca los lindes establecidos entre Almoradí, Orihuela y la Villa de Rafal.

Factura de la compra de objetos de la colección del Marqués de Rafal.

La visita que nos permitió elegir los enseres adquiridos fue conducida por los Marqueses de Valdesevilla, Iván Pardo-Manuel de Villena y L’Epine y su esposa, Lucrecia, que hicieron de magníficos anfitriones mostrándonos hasta el último rincón del palacio, aunque un poco tristes por la pronta desaparición de lo que fue parte importante de la Historia y de su propia vida, ya que este inmueble fue construido en el siglo XVIII y reformado a principios del XX, albergando documentos dos siglos más antiguos, es decir, su fondo documental abarca desde 1582 a 1815.

El recorrido comenzó en los exteriores del palacio, donde pudimos admirar la grandeza y monumentalidad del edificio, blasonado por un enorme y significativo escudo esquinado de nuestro Marquesado.

Iniciamos la visita por el jardín, ya mermado por el paso del tiempo y con menos palmeras a consecuencia del picudo, con un hermoso naranjo, típico de nuestra huerta, y un exuberante y frondoso ficus benjamina, dándonos la impresión del frescor en las tardes de verano y el amor por la naturaleza, aunque hemos de reconocer que un poco abandonado como pone de manifiesto la poca vegetación existente, suavizada por el color terracota de los muros y la verja de hierro que lo circunda y dos hermosas columnas que enmarcan su puerta de entrada.

Una gran escalera principal nos lleva hasta el recibidor del Palacio, preludio de sus innumerables y exquisitos salones. Una vez en el recibidor, el esplendor de sus salas nos traslada a otros momentos de la historia. Seis salones de altos techos distribuidos en hilera desembocan en una gran biblioteca, todo ello en la primera planta del palacio. Fuimos recorriendo los diferentes salones llenos de recuerdos, objetos de un gran valor y plagados de todo tipo de anécdotas, hasta llegar a la biblioteca y al archivo histórico donde pudimos admirar la gran cantidad de libros, manuscritos, legajos, fotos y un largo etc. En esa misma planta se encuentra un enorme comedor, la cocina, más salas secundarias y cuatro grandes dormitorios.

Podemos decir que contiene en su interior interesantes obras pictóricas de diversos siglos desde el gótico hasta la actualidad, pasando por escuelas como la de Flandes del S. XV o la española del S. XVIII, así como obras escultóricas de diversos autores, entre los que destaca José María Sánchez Lozano. También contiene una interesante colección de tapices. A lo largo del recorrido pudimos contemplar algunos detalles muy significativos como el portarretratos de D. Santiago y sus hermanas que nos llenaron de una cierta ternura ya que son, habitualmente, detalles de álbumes fotográficos no expuestos a la vista de los visitantes.

La segunda planta acoge nueve grandes habitaciones, muchas de ellas en suite, grandes baños con acceso a terrazas y cinco salones que comunican el entramado de dormitorios. Un balcón mirador en el interior permite observar la escalera de la entrada principal. Cierra la estructura del inmueble un gran ático con vistas a la ciudad y la montaña. Uno de los aspectos que más me llamó la atención fueron los innumerables recuerdos que testificaban el amor por Rafal, desde el escudo, en diferentes formatos. Un escudo en terracota y otro en hierro forjado del Marquesado de Rafal perteneciente al actual marqués, D. Fernando Pardo-Manuel de Villena y de L’Epine (de 2015 hasta la actualidad).

Y posiblemente, lo que más me emocionó fue comprobar que los obsequios entregados al penúltimo marqués, D. Santiago Pardo-Manuel de Villena y Berthelemy en su visita al 350 aniversario de la Villa de Rafal (9 de junio de 1990) y el recuerdo de la Hermandad de la Flagelación y Nuestra Señora de la Soledad a éste, como portador del Sin Pecado, en el año 2011 y a su esposa Dª. Evelyn de L’Epine, como camarera de honor, se encontraban expuestos a lo largo del tiempo en un lugar preferente del palacio. Este hecho nos indica el afecto y la comunión entre el Marquesado y nuestro pueblo.

Este visita nos permitió no sólo contemplar todos los enseres sino tomar la decisión de elegir aquellos que más utilidad tuvieran para determinados eventos tanto del Ayuntamiento como del Pueblo con el fin de que el Marquesado de Rafal y las personas que lo ostentaron estuvieran presentes entre nosotros. Esta compra no hubiese sido posible sin la deferencia, la oportunidad y el cariño que el Marqués de Valdesevilla y su esposa han tenido con nuestro/su pueblo. Felicito al Excmo. Ayuntamiento de Rafal por esta magnífica iniciativa responsable con el pasado de nuestro Marquesado y dejando constancia, a través de los enseres adquiridos, de la permanencia de nuestro vínculo como pueblo, con toda la historia del pasado, que no queremos olvidar y que nos gustaría seguir ostentando en el futuro.

Rafal a 20 de junio de 2022

Enlaces de Interés

Palacio del Marqués de Rafal – Turismo Orihuela. (n.d.). https://www.orihuelaturistica.es/orh/web_php/index.php?contenido=fichaPoi&idPoi=144&id=0&idNivel=4125&lang=1

Trives, A. (2021, December 15). Así es el palacio señorial del Marqués de Rafal que la Generalitat quiere comprar en Orihuela. Alicanteplaza. https://alicanteplaza.es/asi-es-el-palacio-senorial-del-marques-de-rafal-que-la-generalitat-quiere-comprar-en-orihuela

Palacio en Alicante – Palacio Español en Orihuela – Alicante. (n.d.). https://palacioespana.com/