La Comunidad Islámica de Rafal también ha contribuido con su apoyo en la crisis social derivada de la situación de alarma provocada por el Covid-19. Como símbolo de colaboración ha realizado una donación de 1.500 kilos de productos no perecederos de primera necesidad al banco de alimentos municipal. En cuanto a los alimentos donados se encuentran productos como leche, azúcar, garbanzos, etcétera; que serán repartidos entre las familias en situación vulnerable del municipio.
Un gesto de solidaridad que el Ayuntamiento de Rafal agradece a la Comunidad Islámica en estos momentos de dificultad, y que contribuyen a paliar la dificultad en bienes de primera necesidad que algunas familias padecen. Esta donación resalta además la convivencia y paz social entre distintas culturas, un gesto que en Rafal se muestra en la convivencia diaria de unas 24 nacionalidades distintas.
El alcalde del municipio, Manuel Pineda, ha agradecido los actos de solidaridad que como éste están llegando al Ayuntamiento estos días. Ha aprovechado la ocasión para destacar la aportación que ha realizado alguna empresa con la donación de cajas de conservas, “al igual que distintas comunidades, asociaciones y personas particulares, que en estos momentos quieren contribuir y estar cerca de las familias que nos necesitan, ver cómo todo el vecindario se vuelca en las distintas aportaciones refuerza los lazos y, sobre todo, corrobora que somos un pueblo hermanado y solidario”.
El primer edil también ha indicado que “se sigue trabajando en materia de desinfección y prevención para que los puntos clave y espacios municipales garanticen la seguridad para aquellos que los frecuentan”. Pineda ha puntualizado que “en definitiva el espíritu de unión y trabajo, así como el civismo que están mostrando los vecinos, nos está ayudando a combatir esta difícil situación en la que nos encontramos y que estamos seguros que marcará un antes y un después en muchos ámbitos y sectores”.